Cómo es ser nómada digital

Viajar mientras trabajas o también denominado ser Nómada Digital: Básicamente consiste en poder trabajar mientras viajas porque tu trabajo no precisa de que estés en un lugar en concreto. Existen muchísimos tipos y modalidades. Los hay que trabajan desde dónde quieren pero tienen un horario que cumplir, los hay que se establecen ellos mismos su horario y otros que deciden todo: cuándo trabajan, en qué y dónde viven (Libertad total)

Yo me encasillo en el apartado de estos últimos y además esta vuelta al mundo la comparto con Ze que no trabaja mientras viajamos. En realidad trabaja más que yo, él es quien organiza y planea todo el viaje. Parte indispensable para que yo pueda viajar mientras trabajo. Menciono esto porque tengo flexibilidad para escoger mi horario pero no puedo pasarme por ejemplo un día todas las semanas trabajando porque estamos dando la vuelta al mundo juntos y tenemos un planning que cumplir.

En definitiva, con este post quiero darte una dosis de realidad en lo que es mi vida ahora mismo como persona que viaja y trabaja. Quiero mostrarte algunas de las dificultades a las que me enfrento y las recompensas que recibo a cambio. También quiero que quede claro que esta realidad es la que yo me he puesto a mi misma pero que si tú estás queriendo hacerlo puedes viajar y trabajar bajo tus propias condiciones.

Conozco gente que trabaja un día a la semana entero y el resto disfruta del viaje, otros que trabajan todas las tardes unas horas y el resto del día disfrutan del viaje. Otros que se quedan un mes en cada país y trabajan de lunes a viernes desde su alojamiento y la tarde y los fines de semana disfrutan de poder estar en cualquier lugar del mundo. Vamos que las opciones son infinitas, tú decides cómo lo haces.

Esto de estar moviendonos de lugar en lugar cada pocos días hace que mi ambiente laboral sea diferente todo el rato. No tengo una oficina, dónde quiera que estemos abro el ordenador, me conecto al wifi y que empiece el show. He tenido el placer de trabajar desde espacios únicos con unas vistas de infarto, más cómodos y más formales.

He tenido también muchas (las que más) oficinas improvisadas. Desde asientos de avión, literas, camas individuales o dobles, el suelo o una simple mesa en la esquina de un bar…. cualquier lugar es bueno cuando me tengo que poner manos a la obra.

Tengo facilidad en concentrarme cuando tengo que trabajar asi que el ambiente no me influye mucho, no necesito un lugar organizado para ser más productiva y con el tiempo me he ido acostumbrando a evadirme completamente del ambiente y concentrarme en la tarea.

Trabajo cuando quiero… bueno casi siempre… Soy yo la que decide cuándo trabajo, pero obviamente tengo siempre una fecha de entrega que cumplir. Por lo general siempre me pongo fechas de entrega factibles, que pueda cumplir y que además me den suficiente flexibilidad por si de pronto nos surge un planazo, no hay internet o cualquier otra circunstancia. Haciendo cuentas debo trabajar en total unas 5 horas a la semana, me las reparto como quiero.

Por lo general trabajo cuando me apetece y cuando la fecha de entrega se acerca. Trabajo mejor bajo una ligera presión por lo que unos 4 días antes de tener que entregar empieza mi ventana de máximo rendimiento. Suelo ponerme manos a la obra por la mañana cuando me despierto antes que Ze y trabajo hasta que bajamos a desayunar. Otro momento bueno es por la tarde noche cuando ya nos quedamos en el hostal. Hay siempre días de transportes largos que pasamos horar y horas en buses o aviones y es aquí dónde adelanto muchísimo trabajo. Porque son horas que se me pasan volando si trabajo y horas en que no hay nada que hacer sino esperar a llegar al destino. Cuando juega el Benfica es otro momento estrella de trabajo para mi porque se que al menos durante 3 horas no habrá interrupciones 🙂

Viajar tiene la gran ventaja e inconveniente de que voy cambiando de zonas horarias, por lo que muchas veces esto ha jugado a mi favor y otras en contra. A la hora de organizar reuniones es dificil encontrar una hora buena para ambos sobre todo si yo no tengo ni idea de dónde voy a estar mañana ni qué voy a hacer. Asi que lo que he hecho es decir siempre que si a la reunión que marca el cliente y después buscar la forma de conectarme a la hora establecida. Cuando estuvimos en Asia tenía casi todas las reuniones de madrugada (1am, 2am y hasta 3am). La ventaja era que la wifi del hostal era toda mía y que siendo esa hora yo iba a estar en un lugar tranquilo con mi ordenador. El inconveniente que tenía que despertarme para tener la reunión y después volver a dormirme (inconveniente pequeño teniendo en cuenta que yo no tengo que madrugar).

Si la reunión me pillaba en la calle pues conectaba los datos del móvil y me conectaba. En Galápagos tuve algunas reuniones en la playa, esta foto la saqué 5 minutos después de la llamada porque recibí un email diciendo : ¨Let´s do it Elisa! ¨ contrato cerrado y trabajo para los próximos meses…..

El único problema surge cuando NO HAY INTERNET! Por lo general no pasa casi nunca porque tenemos siempre una tarjeta con datos y el móvil hace de hotspot para el ordenador cuando nos hace falta. Pero ha habido veces que no hay ni datos, ni red móvil ni nada de nada….ante ese escenario no se puede enviar nada de nada. En Nepal durante el trekking y en alguna que otra isla paradisíaca de Asia no tuvimos nada de nada por lo que envié un email diciendo que iba a estar un tiempo sin conexión.

El otro problemilla principal es el wifi / internet lento…. no solo ya no estamos acostumbrados a esto y nos desesperamos sino que muchas veces si es lento los archivos no se adjuntarán al email o tardará todo tanto que pierdes las ganas y la motivación de . Puedo obviamente hacer muchas cosas sin conexión pero a la hora de responder emails, tener videollamadas, y enviar el trabajo necesito una buena conexión que no siempre está presente.

Los enchufes suelen ser otro problema, no siempre están bien situados y la creatividad tiene que surgir en los momentos más inadecuados para conseguir cargar. Por lo que muchas veces me las tengo que ingeniar para conseguir una buena conexión y poder tener todos los dispositivos bien cargados.

Es cierto que no todos los meses facturo lo mismo, depende de la cantidad de trabajo que tenga al mes y del tipo de trabajo que ha sido. Ahora bien, un buen mes compensa muchos “malos meses” y no ha habido un solo mes en que no facture nada porque cuando tienes los huevos en cestas diferentes nunca te quedas sin huevos. Te cuento más sobre esto en el próximo post. Pero si quieres saber más sobre qué es exactamente lo que hago y cómo fui moviendo ficha de un trabajo tradicional a ser nómada digital vete al post sobre cómo pasé de trabajar 13 horas diarias a 4.

Por lo general tengo la facturación automatizada, a través de dos plataformas Upwork y Andco dónde se emiten las facturas, salen emails automáticos y el dinero entra directamente en mi cuenta. Pero a veces hay clientes que se olvidan, hay pagos que quedan pendientes o hay cambios en lo que acordamos que tienen que ser contabilizados.

Trabajar mientras viajas es un arma de doble filo: estás más creativo y más inspirado que nunca pero también puedes estar completamente agotado. En este último caso no me estreso y descanso, también he aprendido a rechazar trabajo cuando no me viene bien por el planning del viaje que tenemos o simplemente porque se que ese proyecto no me va a motivar lo suficiente como para que me compense. Mejor es mejor!

Siempre pienso “ lo haría gratis?” Si la respuesta es si, cojo el trabajo si la respuesta es no, educadamente rechazo el proyecto o sugiero que partes del mismo me gustaría hacer.

Cada proyecto me da acceso y me brinda la posibilidad de aprender muchísimo. Yo soy consultora de sostenibilidad por lo que colaboro con equipos. Ofrezco mi especialidad adaptada a las necesidades y requisitos del proyecto. En este proceso tengo contacto con otras personas en calidad de colaboración donde todos ponemos nuestro granito de arena (en base a nuestra especialidad).

Ya sea colaborando con los diseñadores gráficos, con los responsables de recursos humanos, de las finanzas, con el jefe de la empresa o con el que está en prácticas SIEMPRE aprendo algo que no sabía. Y este aprendizaje me permite ofrecer mayor calidad en mi siguiente trabajo y me permite ofrecer mayor valor.

Creo que lo que hace todo esto posible es sobre todo tener persistencia y montartelo de forma que te guste lo que haces. Si además consigues vivir de ello (generar suficiente como para vivir la vida cómo quieres), pues ya le pusiste la guinda al pastel. Hay días que echo de menos tener cerca a colegas de trabajo, pero esos días llamo a alguno por Skype. Hay días que me gustaría un ambiente de oficina, asi que esos días voy a un café dónde hay más nómadas digitales o a un coworking. Hay días que no consigo concentrarme y entonces me doy la vuelta y molesto a Ze….

En el próximo post te explico en detalle las características que tiene mi negocio de consultoría online para ser TAN FLEXIBLE, que me permite vivir dando la vuelta al mundo. Me da un chute de energía enorme saber que si puedo trabajar mientras viajamos a este ritmo cuando dejemos de viajar permanentemente y volvamos a ¨casa¨ mi vida será completamente diferente. Podré conciliar mi trabajo con absolutamente todo lo que quiera.

Te sigo contando en el próximo post….